miércoles, 14 de marzo de 2018

El hilo

Cada vez más cerca,
y cada vez más lejos.

No tengo un destino claro,
ni metas, ni trofeos.
No habla por mí el amparo,
ni señalo con los dedos.
Quiero moverme,
quiero volver a creer;
que el juicio sea por instinto
siempre,
y acabar estirando el hilo,
que nos hace contraer.

Cada vez más cerca,
más a mano lo que buscaba,
pero ya no está esa fiera
por la que al vacío
-sin pensar- me lanzaba.

Y cada vez más lejos,
se unen los caminos
y se separan las metas.
Una es llegar a viejos
y cruzar destinos;
la otra es dejar la puerta abierta.